Durante esta semana hemos estado realizando numerosas actividades de Halloween para celebrar esta famosa festividad. Entre ellas el cole propuso un magnífico concurso de puertas terroríficas, y nos pusimos manos a la obra.
Decidimos hacer una puerta zombie, en la cual nosotros íbamos a ser los protagonistas. Con un poquito de imaginación creamos una puerta que nos encanta y os vamos a contar como lo hemos hecho.
Lo primero de todo forramos la puerta de marrón y le pusimos precinto amarillo cruzado, asemejando que estaba precintada y no se podía pasar. Además buscamos en internet unas imágenes muy chulas que encontramos con advertencias de que entraban a una zona zombie, pues era en lo que queríamos convertir la clase. Os dejamos las imágenes a continuación por si os pueden servir a vosotros.
Tras esto llegó la hora de interpretar y nos hicimos unas fotos en las que dábamos mucho miedo. Esas fotos las recortamos y las pintamos. Como éramos zombies con tizas de colores fuimos pintándonos la cara, zombies naranjas, rosas y hasta morados. !Qué divertido!
Luego, con un rotu permanente nos dibujamos unas cicatrices super graciosas. Ya solo quedaba pegarnos en los laterales del precinto como si nos asomáramos por la puerta.
Además de esto escribirnos un mensaje alertando que era peligroso pasar.
Y por último, para que nuestra puerta diera un poquito mas de miedo, estampamos y arrastramos nuestras manos rojas.
Quedó así de bonita.
Además de la nuestra, el pasillo de infantil se llenó de otras puertas chulísimas y maravillosas, parecía un museo. Os dejamos unas fotos para que podáis comprobarlo vosotros mismos.
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